Yahoo Finanzas De película: el legado de la emperatriz, para el chofer
La suma millonaria que el Sha Reza Pahlavi donó a la emperatriz Soraya pro fin tiene dueño: un chófer. Después de 15 años los tribunales alemanes han convertido en heredero de la fortuna de la emperatriz, valorada entonces en alrededor de 60 millones de euros, al chófer y secretario privado de Biján, el hermano menor de la princesa fallecido en 2001.
Así lo ha decidido la Audiencia Territorial de Colonia, la ciudad alemana donde vivió y murió Biján, que murió una semana después de que lo hiciera la propia emperatriz. La justicia ha dado por bueno el apunte realizado por el hermano de la emperatriz en su agenda, donde expresaba su voluntad de nombrar beneficiario de todos sus bienes a su chófer y secretario privado Hassan.
Soraya, conocida también como la ‘princesa de los ojos tristes’ fue la segunda esposa del Sha de Persia. Repudiada por no haberle dado descendencia, apareció un día muerta en su apartamento de París. En su testamento dejó dicho que se subastaran sus propiedades y designaba heredero a su hermano Biján, que paradójicamente murió una semana más tarde sin dejar últimas voluntades.
La sentencia pone punto final a 15 años de intrigas que han alcanzado tintes novelescos. Merece la pena destacar, por ejemplo, que más de 50 personas respondieron a la llamada del Gobierno alemán en busca de herederos tras la muerte del hermano.
El caso más extremo fue protagonizado por un sujeto de Siegburg, localidad próxima a Colonia, quien dijo ser hijo natural de Bijan y obligó al juez a pedir la exhumación de los restos para realizar una prueba de ADN que resultó fallida.
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Foto Wikimedia Commons: Sandra Besga
No es este el primer caso en que un chófer se convierte en la persona más cercana y heredero de un famoso. En 2012 el magnate de la industria discográfica Alan Meltzer repartió 1,5 millones (el 10% de su fortuna) entre su chofer y el portero de su finca en la Gran Manzana. Unos años antes, la millonaria hotelera Leona Helmsley dejaba parte de su herencia a su perrita, mientras dos de sus cuatro nietos se quedaban con las manos vacías.
Sin ir más lejos, el año pasado la artista cómica española Lina Morgan convertía en heredero único a su conductor y hombre de confianza. Y dejaba boquiabiertos a los familiares más allegados y a varias ONGs que esperaban la generosidad de la cómica. Su fortuna se calculó en 40 millones de euros, compuesta por joyas, diamantes, negocios relacionados con el espectáculo y pisos.
Después de acumularse un sumario de 30 tomos, los tribunales tendrán que volver a inventariar la fortuna de la princesa. Entre sus objetos personales había una alianza de platino con un diamante de 23 kilates y un collar de zafiros diseñado por Bulgari (ambos regalo del Sha) valorados en dos millones de euros, una importante colección de obras de arte, alfombras orientales, pieles, plata y hasta un Rolls-Royce. Durante estos años el Gobierno alemán, siguiendo las indicaciones del testamento, ha subastado algunos bienes y parece que ha destinado el dinero a comprar camiones de basura. Habrá que ver si el contencioso ha terminado o sólo es el principio de un nuevo pleito.
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