Yahoo Finanzas Ricos, poderosos y… los más buscados
Suman fortunas millonarias, están protegidos por auténticos ejércitos y llevan años eludiendo a la justicia a pesar de que su cara es la más repetida en los carteles de 'Se Busca'. Las actividades delictivas han catapultado a tres de los grandes capos del hampa internacional a la lista de los hombres más poderosos y ricos del mundo, elaborada por la revista Forbes. A pesar de que las agencias de inteligencia internacionales han puesto precio a su cabeza y bloqueado sus cuentas bancarias, siguen amasando cada vez más dinero con el terrorismo, el tráfico de drogas o el contrabando.
Millonario y mundialmente temido
El rey de los millonarios a la fuga es el líder y fundador de Al Qaeda, Osama Bin Laden. Hijo de uno de los empresarios de la construcción más ricos de Arabia Saudí, heredó una fortuna de cerca de 300 millones de dólares. En lugar de disfrutarla cómodamente, decidió convertirse en el mayor financiero del terrorismo islámico internacional. A Bin Laden se le atribuye la responsabilidad de los atentados contra las embajadas de Estados Unidos en Tanzania y Kenia en 1998, que causaron 224 muertos, además de los atentados terroristas a las Torres Gemelas del 11 de septiembre de 2001.
Desde entonces vive en la clandestinidad, pendiente de que nadie le traicione por los 25 millones de dólares que el Departamento de Estado norteamericano ofrece por su cabeza. Sin embargo, pese a estar en paradero desconocido y haber sido repudiado oficialmente por los suyos, su patrimonio sigue creciendo gracias a la buena salud de la que gozan los negocios inmobiliarios familiares en Arabia Saudí. Su saneada economía, que ha logrado evitar los embargos estadounidenses hasta la fecha, le permite seguir sufragando sus actividades terroristas y situarse en el puesto número 57 entre las personalidades más poderosas del planeta, según Forbes.
Criminales, mafiosos, traficantes
Tres puestos más abajo, en el 60, aparece uno de los hombres más sanguinarios, peligrosos y ricos. Se trata de Joaquín el chapo Guzmán. La cabeza visible del mexicano Cártel de Sinaloa gestiona el imperio más rentable del crimen organizado, con volumen de negocio de 39.000 millones de dólares. El tráfico de drogas e inmigrantes y los asesinatos a la carta le han permitido acumular una fortuna personal de más de 1.000 millones de dólares. Su leyenda nació en 2001, cuando consiguió escaparse de la cárcel de Guadalajara (México) tras sobornar a los guardias poco antes de se extraditado a Estados Unidos. Desde entonces permanece escondido y protegido por varios centenares de sicarios bien armados. Ni los clanes rivales, ni los gobiernos mexicano y estadounidense, que ofrecen una recompensa conjunta de casi 7 millones de dólares por cualquier pista sobre su paradero, han conseguido dar con él.
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El gángster indio Dawood Ibrahim Kaskar cierra las tres primeras posiciones del listado de delincuentes millonarios. El sindicato del crimen que lidera, conocido D-Company, está envuelto en todo tipo de delitos, desde narcotráfico a la falsificación, pasando por los asesinatos selectivos. Opera en India, Pakistán y Emiratos Árabes. Además, según Forbes, tiene fuertes vínculos con Al-Qaeda y su mano está detrás de los atentados de 2008 en Bombay, donde su organización ya perpetró otro sangriento ataque en 1993, en el que murieron 257 personas.
La fortuna de este hijo de policías de 54 años se supone en torno a los 1.000 millones de dólares, aunque algunos expertos estiman que es hasta seis veces superior. Ibrahim prefiere mantener bien diversificado su patrimonio a través de un complejo entramado financiero para evitar que su nombre aparezca en las listas de los más ricos del planeta.
