¿Cómo es la cara del jefe perfecto?

Los resultados de una empresa dependen de las características físicas y del rostro de su presidente. Al menos así lo afirma un estudio publicado recientemente por la universidad estadounidense de Milwakee después de analizar la fisonomía de la cara de 55 de los directivos más importantes de la lista Fortune 500.

Las conclusiones a las que llegó el equipo de la doctora Elaine Wong, publicadas en la revista científica 'Psychological Science', aseguran que el jefe perfecto debe tener la cara ancha y de forma cuadrada. Esta morfología facial suele ser común a las personas enérgicas, confiadas y que suelen ganarse el respeto de los demás con cierta facilidad. Y es bueno para la salud de la empresa.

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De acuerdo con el informe, un responsable con estas características contribuyen a mejorar el desempeño de la compañía. "Los ejecutivos con un rostro ancho, como Herb Kelleher, exdirector ejecutivo de Southwest Airlines, obtienen un mejor rendimiento que los cara larga como el consejero delegado Dick Fuld, el CEO de Lehman Brothers en el momento de su quiebra", afirma el estudio, que reconoce que esta regla sólo se cumple en los hombres.

Rostro alargado, sinónimo de agresividad
Ésta no es la primera vez que los investigadores estadounidenses relacionan el éxito en un determinado sector con la longitud y anchura de la cara. Además, la forma facial también determina la agresividad de una persona, al estar directamente relacionada con los niveles de testosterona de los hombres o, lo que es lo mismo, de la concentración de hormonas de la virilidad en el torrente sanguíneo.

De hecho, se ha comprobado que en la liga profesional de hockey de Estados Unidos, la NHL, los jugadores con un mayor número de minutos de sanción son aquellos que cuentan con un rostro con forma alargada, mientras que los más queridos y en los que más confía la afición son los que tienen la cara más ancha.