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Google, víctima del boicot publicitario más ingenioso

Si eres una gran compañía, te puedes permitir invertir cantidades astronómicas de dinero en estudios de mercado y campañas publicitarias. O también puedes echarle un poquito de morro y aprovechar las inversiones de otros… Con un par de narices.

Esto es precisamente lo que hizo Zappos hace poco: se colaron en una acción de Google y, sin ningún reparo, se plantaron justo enfrente aprovechando el tirón que genera la compañía. El resultado fue divertidísimo.

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El ingenioso “secuestro publicitario” tuvo lugar en Austin, Texas, donde Google instaló un camión de comidas para publicitar una nueva app de fotografía. El gancho era simple: “paga con una foto”. A cambio de probar la aplicación, te regalaban una magdalena.

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Ni cortos ni perezosos, los de Zappos se presentaron allí y justo enfrente del camión de Google instalaron una “máquina” (en realidad era una persona metida en una caja, y es que cuanto más cutre, más gracioso) y lanzaron una contrapropuesta de lo más oportuna: “paga con una magdalena”. Si metías la magdalena en la “máquina”, te devolvían un regalo mucho mejor.

Al principio la gente dudaba, pero tras ver que otros obtenían regalos como mochilas, relojes o gafas de sol, se acabó formando una buena cola para insertar la magdalena. Tanto que hasta la chica del camión de Google acabó probándolo también.

El vídeo resultante es de lo más cómico: la caja de regalos caminando sola con sus patitas, la música, las risas de la gente y sobre todo el morro y el desenfado con que la compañía incluso le da las gracias a Google por las magdalenas, sin cortarse un pelo. Todo ello ha caído tan simpático que, por lo visto, ni siquiera al gigante tecnológico le ha sentado mal el oportunismo de Zappos. Epic win!