Yahoo Finanzas El chocolate más asqueroso del mundo viene con sorpresa
Ver azafatas en un centro comercial ofreciendo degustaciones gratuitas de productos se ha convertido en una estampa habitual. Sin embargo, esta práctica ha tomado una nueva dimensión en Portugal tras una acción protagonizada por una desconocida marca de chocolate llamada Inspirit.
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Los consumidores que aceptaron el ofrecimiento de la azafata a probar el nuevo producto seguro que no olvidarán nunca la situación vivida, ya que ninguno podía imaginarse cómo iba a acabar la experiencia. Y cómo no, tampoco que estaban siendo grabados por una cámara oculta.
La primera gran sorpresa que se llevaron fue el sabor del chocolate, servido caliente en un vaso. En vez de tener un gusto agradable como era de esperar, el producto estaba amargo y para nada apetecible.
Las reacciones de los involuntarios protagonistas de la acción fueron de todo tipo. Algunos pusieron caras de compromiso tratando de disimular la decepción, a otros directamente les dio asco e incluso llegaron a escupir el chocolate incapaces de tragarlo.
¿Y dónde está la gracia de la acción, simplemente en hacerles pasar un mal rato y grabarlo? Nada de eso. La cata en realidad no estaba dirigida a promocionar un producto sino a concienciar sobre la situación de pobreza que viven muchos niños en Costa de Marfil.
De esto se dieron cuenta los participantes cuando la azafata descubrió un cartel con un mensaje explosivo: "Amarga es la vida de los niños que trabajan en los campos de cacao". Junto a él, el logotipo de Inspirit, que en realidad es una ONG que opera en el país africano y no el nombre del inexistente chocolate a la taza.
La campaña es un buen ejemplo de que las acciones con cámara oculta pueden ser efectivas también para fines solidarios si se aplica el ingenio. No todo es hacer creer a las 'víctimas' que se acaba el mundo o darles sustos de muerte en hoteles habitados por fantasmas.
