Yahoo Finanzas El anuncio de mal gusto que nadie entiende
"Sexista". "Degradante". "Estúpida". "Denigrante". Estos son algunos de los adjetivos que están empleando los usuarios para describir la última campaña publicitaria de Watta, una marca de agua de Guatemala cuya agresiva estrategia promocional le ha generado un gran problema de reputación.
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La marca ha difundido varios anuncios de dudoso gusto en los que se ve a mujeres con minifalda o vestido corto bajándose de un coche. Estas imágenes representan situaciones reales vividas por celebrities en las que los paparazzi han aprovechado para fotografiar sus partes íntimas. El movimiento necesario para bajar del vehículo y el hecho de que las famosas no llevaran ropa interior, se tradujo en morbosas portadas de revistas.
La 'brillante' idea creativa de Watta ha sido colocar una imagen de una botella de agua en la entrepierna de las involuntarias protagonistas, de modo que sus vergüenzas quedan tapadas por el producto. Su cara también aparece casi oculta por una estrella en la cual se puede leer "Agua fresca".
Que las piezas son poco elegantes es algo que nadie pone en duda. Sin embargo, el significado de la campaña está generando todo tipo de opiniones en la red. Nadie parece entender qué relación existe entre una marca de agua y las instantáneas de las famosas con marcado contenido sexual, si es que realmente hay una conexión que aporte algo de cordura a la campaña publicitaria.
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Algunas de las teorías apuntan a que la forma alargada de la botella es una analogía con un símbolo fálico, lo cual supondría que los anuncios fueran todavía de peor gusto. Otros usuarios opinan que el mensaje que quiere transmitir la campaña es que si las famosas hubieran bebido agua fresca no tendrían calor, y por tanto no habrían salido a la calle sin ropa interior.
Tampoco ha pasado desapercibido el slogan de la marca: "Watta, agua pura pero con estilo". Pueden decirse muchas cosas de la marca, pero ha quedado más que patente que estilo no es precisamente algo que les sobre. Salvo que la compañía sorprenda a todos y aporte una explicación razonable que dé sentido a la campaña, lo normal será pensar que han buscado darse a conocer a cualquier precio. Y para ello nada más efectivo que valerse del sexo y generar polémica.
