Yahoo Finanzas Este impactante anuncio salvará vidas en la carretera
Australia se ha caracterizado siempre por ser uno de los países más activos en la lucha contra los accidentes de tráfico, para lo cual se han lanzado todo tipo de campañas para concienciar a sus ciudadanos sobre las principales causas de los siniestros.
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El gobierno se ha esforzado en alertar sobre los peligros que supone conducir con exceso de velocidad o bajo los efectos del alcohol y las drogas. Sin embargo, se han dado cuenta de que no habían luchado nunca contra un ‘enemigo’ que se está cobrando un gran número de vidas en sus carreteras: las distracciones provocadas por los teléfonos móviles.
La decisión del país oceánico, y más concretamente el estado de Victoria, ha sido declarar la guerra al uso de teléfonos al volante. Para ello han lanzado una impactante campaña que busca que los conductores reflexionen sobre un dato revelador: “Si te distraes simplemente dos segundos a 50 km/h, recorrerás 27 metros totalmente ciego”.
Este mensaje lo han plasmado en un spot que muestra tres situaciones en las que una persona se desconcentra por estar pendiente del teléfono móvil. En la primera se debe al uso del GPS, que le deja ‘ciego’ durante dos segundos y hace que no se percate de que el coche de delante está frenando. Se salva del impacto por poco…
El mismo conductor aparece después escuchando música en su dispositivo mientras conduce por una tranquila carretera. En el breve tiempo que dedica a cambiar de canción está a punto de embestir a un grupo de ciclistas. La última situación escenifica una distracción motivada por un mensaje de whatsapp, que hace que el protagonista atropelle a una joven estudiante que se había bajado del autobús. Imposible no reflexionar después de ver el acertado anuncio.
Con esta campaña el gobierno de Victoria confía en reducir la cifra de 55.000 multas puestas a conductores en 2012 por distracciones causadas por el mal uso de teléfonos móviles. Sin olvidar que hay otras circunstancias que también aumentan el riesgo de sufrir un accidente como comer o maquillarse al volante.
